La Asociación Española de Normalización, UNE, ha publicado el nuevo informe Apoyo de la Normalización a un sector agroalimentario sostenible y digital, con el objetivo de impulsar la obligada evolución de las organizaciones y empresas del sector primario y de la industria alimentaria.
A través del documento, que recopila estándares y proyectos de aplicación voluntaria, se ofrecen soluciones para la consecución de sistemas sostenibles e innovadores que permitan el desarrollo y crecimiento del sector agroalimentario español. El informe identifica más de 40 normas y futuras normas que aportan soluciones sobre cuestiones imperativas.
La sostenibilidad del sistema alimentario reporta beneficios ambientales, sanitarios y sociales a la vez que ofrece ventajas económicas. Una parte de los estándares que apoyan medidas para la sostenibilidad se presentan en este informe agrupados por sectores de actividad: producción alimentaria, pesca y acuicultura, agricultura, algas y productos apícolas. En este sentido, se ofrecen soluciones para controlar el impacto de estas actividades, promoviendo modos de producción ecológica que disminuyan la dependencia de productos fertilizantes, fomenten la producción de nuevos alimentos sostenibles o prácticas responsables de pesca y cría.
Otro grupo de estándares, que aporta soluciones en cuestiones no exclusivas del sector agroalimentario pero que le corresponde gestionar, se presentan en ejes transversales que contribuyen con el objetivo general de compromiso con la sostenibilidad: valoración monetaria de los impactos ambientales, compras sostenibles, taxonomía europea, gestión ambiental de envases y embalajes, pérdida y desperdicio alimentario y biodiversidad. Las organizaciones privadas y públicas se exponen a riesgos y oportunidades debido a los impactos ambientales beneficiosos o adversos relacionados con su actividad.
El desarrollo tecnológico está cambiando los modelos de negocio y los procesos de producción e industriales de todos los sectores, incluidos el agroalimentario. Esta incorporación de la tecnología de la información a toda la cadena de valor va a precisar también una optimización e interacción de los procesos de investigación y desarrollo, diseño, producción y logística.
Asimismo, este uso masivo de la tecnología ha convertido la información en uno de los principales activos de una empresa, por ello la ciberseguridad es fundamental para garantizar la protección de los datos y la privacidad de las personas.