El comercio será una de las palancas que ayuden a la economía y a las empresas españolas a afrontar el próximo período. Las normas técnicas desempeñan un papel fundamental para entrar en el mercado único europeo y en el comercio mundial.
Miguel Ángel Aranda
Coordinador Internacional
Mónica Sanzo
Directora de Cooperación y Relaciones Internacionales
UNE
Son muchos los retos a los que la sociedad mundial se está enfrentando durante 2020. Uno de los que probablemente marque más el futuro cercano es la confianza en la calidad y seguridad de los productos, en una nueva normalidad claramente influenciada por la digitalización.
En este nuevo entorno, en el que cada vez la adquisición de productos y la prestación de servicios se realiza a través de internet, es fundamental que los mecanismos que reguladores, fabricantes y Estados ponen a través de la Unión Europea constituyan un marco estable, basado en la confianza de todas las partes involucradas. El objetivo es garantizar la calidad y seguridad de los productos y también su libre acceso al mercado único.
En este marco, la legislación europea viene apoyándose desde hace más de 30 años en las normas técnicas para el despliegue de las políticas europeas. El Nuevo Enfoque, mediante el cual los organismos de normalización y los legisladores europeos han mantenido una colaboración de éxito, ha constituido una herramienta eficaz para todas las partes.
Ahora debe reforzar su rol, en momentos en los que el comercio internacional y digital serán claves para la supervivencia de muchas empresas, especialmente pymes.
En estos momentos, existen algunas dificultades en la citación de normas europeas como normas armonizadas. Por ello, es fundamental que la Comisión Europea y los organismos europeos de normalización CEN y CENELEC realicen todos los esfuerzos para que las normas continúen prestando la importante función como soporte a la legislación europea, ya que las normas armonizadas europeas son clave para que las empresas puedan acceder al mercado único.
En esta colaboración es esencial la confianza mutua y la participación de expertos europeos de todas las nacionalidades representando al amplio abanico de partes interesadas que desarrollan normas.
Una de las seis prioridades generales de la Presidencia semestral alemana del Consejo de la Unión Europea es contar con una Europa más fuerte e innovadora. Para ello, indica que Europa debe lograr una mayor capacidad de actuación de las nuevas tecnologías, cuyo desarrollo debe basarse en estándares y normas comunes. Al mismo tiempo considera clave el refuerzo de la competitividad.
El espacio económico único de la UE sin fronteras interiores constituye la base de la prosperidad europea, lo que hace necesario seguir trabajando en favor de la aplicación y cumplimiento efectivo de las normas del mercado único y de la eliminación de los obstáculos restantes no justificados al mercado único.
Las normas técnicas son el lenguaje que hablan los mercados mundiales y la llave de acceso de las empresas a las exportaciones
Marco normativo eficiente
La clave para lograr este objetivo es establecer un marco normativo eficiente, favorable a la innovación y preparado para el futuro. Europa debe apostar por mantener abiertos los mercados y fortalecer el comercio y las inversiones sobre la base de normas internacionales aplicables.
En el marco del Plan de Recuperación para Europa, la Comisión Europea ha identificado 14 áreas industriales prioritarias, los llamados ‘Ecosistemas’: turismo, industrias culturales, aeroespacial y defensa, textiles, electrónica, movilidad inteligente y sostenible, industrias intensivas en energía con bajas emisiones de carbono, energías renovables, agroalimentaria, salud, industrias digitales, construcción, comercio minorista y vida local.
Como consecuencia, se está adaptando el borrador del Programa de trabajo anual de la UE para la normalización de 2021 para reflejar las prioridades de la recuperación industrial; hacia estos y otros ámbitos dirigirán sus esfuerzos los organismos de normalización.
El Pacto Verde también ofrecerá numerosas oportunidades para España. Energías renovables, economía circular y biotecnología pueden ser lideradas por España y ya existen desarrollos de normas internacionales y europeas para fortalecer los proyectos existentes en el ámbito reglamentario y de innovación.
Digitalización y Mercados globales
Además, es necesario trabajar para fomentar la digitalización del tejido empresarial y de las Administraciones públicas y reforzar la ciberseguridad. En materia de ciberseguridad CEN y CENELEC jugarán un papel relevante al contribuir al desarrollo de los diferentes esquemas de evaluación de conformidad que darán soporte al Reglamento de ciberseguridad, identificando y promoviendo los desarrollos de normas necesarios para la implementación de esta legislación.
Lejos de centrarse sólo en las oportunidades del mercado único europeo, la UE mira también hacia el exterior y trabaja para potenciar alianzas comerciales más allá de sus fronteras, que permitan a las empresas europeas poner sus productos en mercados globales en las condiciones más favorables.
Además de las medidas y planes ya mencionados respecto a la política industrial, el Comisario de Comercio de la UE acaba de lanzar la revisión de la Política Comercial de la UE, para hacer frente a las dificultades que han marcado los últimos años; tales como la debilitación del multilateralismo, las tendencias proteccionistas, la caída de los flujos comerciales, las carencias de las cadenas de suministro o el aumento de los costes del transporte.
Esta revisión busca mitigar las consecuencias económicas de la crisis trabajando en un modelo financiero sostenible y coherente que aboga por la trazabilidad, la seguridad de suministros, la diversificación de proveedores y la búsqueda de nuevas oportunidades. Todo ello apostando por mercados globales abiertos, sin trabas para la exportación, impulsando la competitividad y dando continuidad a las negociaciones de los acuerdos comerciales.
Respecto a los acuerdos comerciales la UE, ha construido una de las redes mundiales más extensa y aplica varias modalidades: unión aduanera, acuerdos de asociación, acuerdos de estabilización, acuerdos de libre comercio (incluyendo los amplios y profundos), de asociación económica y de cooperación y asociación.
Recientemente Singapur y Vietnam se han convertido en nuevos socios comerciales de la UE con la entrada en vigor de los respectivos acuerdos de libre comercio. En la actualidad la UE está en negociaciones, entre otros, con Nueva Zelanda y Australia, Indonesia, EE. UU., Canadá, China, Reino Unido, Mercosur, México, Chile, y Marruecos.
Exportaciones españolas
En esta línea, durante los últimos años UNE ha desarrollado una política de firma de acuerdos con los organismos de normalización de aquellos países objeto de las exportaciones españolas.
El objetivo es armonizar los requisitos de los productos a través del uso de estándares internacionales, reforzando la eliminación de las barreras técnicas y, en consecuencia, impulsar las exportaciones e internacionalización de las empresas españolas.
UNE tiene en vigor más de 15 convenios de colaboración con: Bolivia, Brasil, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, El Salvador, México, Perú, República Dominicana, Uruguay, así como la Asociación Mercosur de Normalización y China.
En su reciente Informe Facilitando el comercio con Latinoamérica, UNE analiza los distintos convenios. Gracias a estos, se han intercambiado más de 2.000 normas UNE con los organismos de normalización de los países latinoamericanos en apenas tres años. Estos acuerdos ponen de manifiesto que las normas técnicas son el lenguaje que hablan los mercados mundiales y la llave de acceso a las exportaciones y la internacionalización de las empresas.
Así, la Organización Mundial del Comercio (OMC), encargada de velar por los acuerdos globales, aboga por el uso de estándares internacionales como pilar básico para la eliminación de las barreras técnicas comerciales.
Dentro de las acciones de revisión de la de la Política Comercial, la UE ha lanzado una encuesta pública. Deberemos conocer sus resultados (necesidades, sectores y países prioritarios), que marcarán la estrategia comercial de la UE en los años venideros.
No debemos olvidar que la política comercial no sólo busca la sostenibilidad económica si no que visibiliza los valores de la UE (derechos humanos, laborales y sociales, igualdad de género, medio ambiente, clima y desarrollo sostenible) en el exterior.
Además, aborda aspectos como el análisis de riesgos, los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), la responsabilidad social, el compliance, la digitalización, la resiliencia, el blockchain o el big data. Aspectos que abordan los estándares para aportar soluciones técnicas viables, innovadoras y competitivas.
Los organismos de normalización siguen trabajando para alinear sus actividades con las realidades de entornos dinámicos, ayudando a los operadores económicos a ser más resilientes y sostenibles. Ya sea adaptando estrategias de normalización a las necesidades que marcan los nuevos escenarios que se dibujan en el futuro, creando nuevas áreas o reforzando aquellas que garantizan la operatividad de las organizaciones y la continuidad de sus actividades.
En definitiva, siendo una herramienta sólida para el desarrollo de políticas y estrategias comerciales a cualquier escala.