El Secretario General de ISO ha visitado España recientemente y entre su apretada agenda, que entre otros actos ha incluido una reunión con la Ministra de Industria, Comercio y Turismo, ha hecho un hueco a la revista UNE. Sergio Mujica subraya el valor diferencial de los estándares para que las organizaciones y la sociedad superen con éxito sus grandes desafíos, en áreas como el comercio, la competitividad empresarial, la sostenibilidad o los ODS. Mujica también destaca la alta participación española en el desarrollo de estándares internacionales, así como el papel clave de UNE en ISO.
Fotografías: J.A. Rojo
Recientemente han difundido las cuatro tendencias que marcarán el desarrollo de la estrategia de ISO ¿cuáles son?
Lo primero es entender muy bien el entorno en el que trabajamos y cómo va a influir en nuestra capacidad de dar una respuesta eficaz a los desafíos globales a los que nos enfrentamos.
En este contexto, hemos identificado cuatro áreas principales en la estrategia de ISO. La primera tiene que ver con la incertidumbre e inestabilidad asociadas actualmente al comercio internacional y a la economía. Esto se ve claramente reflejado en el Brexit o en las guerras comerciales.
La segunda tendencia global tiene que ver con el mundo digital, ya que este avanza a una velocidad vertiginosa y la normalización tiene que ser capaz de responder con eficacia a este desafío.
La tercera está relacionada con los cambios sociales, de comportamiento y de expectativas de la sociedad actual. Esto lo vemos muy bien reflejado en la economía colaborativa. Además, también existen cambios en las expectativas de los consumidores; estos no solo demandan un producto de calidad y a un precio razonable, sino que con su decisión de compra también quieren asegurarse de que están contribuyendo a la solución de los problemas actuales y que no los están agravando. Por eso, las certificaciones relacionadas con los valores de la sociedad son muy importantes para los consumidores.
Precisamente, la cuarta tendencia tiene que ver con la sostenibilidad. Ya no se trata sólo de estar concienciados con el cuidado del medio ambiente sino que, por primera vez, vemos un sentido de urgencia muy relevante. Por ejemplo, ahora que se ha celebrado la COP 25 en Madrid, hablamos de tomar medidas concretas y urgentes para revertir la situación.
¿Qué papel tienen los estándares internacionales ISO en la consecución de los 17 ODS?
Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de Naciones Unidas representan el consenso global de más de 190 países sobre lo que tenemos que hacer para conseguir de este mundo un lugar mejor y responder de la mejor manera a las necesidades de las personas.
Para mí, el mayor valor de los ODS es que representan esta visión compartida, colaborativa y de consenso: desde los países más pequeños o más pobres, hasta los más grandes y desarrollados. Todos trabajando por esta causa común que se materializa en 17 Objetivos.
¿Cuál es el papel de las normas que desarrollamos dentro de ISO? La normalización puede ayudar a implementar estos Objetivos y a transformarlos en algo tangible y medible. Las normas ISO son una verdadera hoja de ruta en la consecución y cumplimiento de los 17 ODS.
¿Qué hemos hecho en ISO como Organismo internacional? Varias actuaciones; primero, por nuestra naturaleza colaborativa y de alianzas, nos hemos conectado con la red de organismos para trabajar en la implementación de los ODS. Así, organizamos con Naciones Unidas un evento en el marco de nuestra Asamblea General el año pasado para concienciar sobre la importancia de las normas como aliados estratégicos para conseguir los ODS.
En segundo lugar, hemos creado una herramienta informática que permite identificar las normas ISO que facilitan la consecución de cada ODS. Y a la inversa: si buscamos el código o título de una norma, nos muestra los ODS más relevantes a los que este estándar facilita su consecución.
Además, hemos hecho un esfuerzo en comunicación, aunque todavía tenemos que progresar. Así, hemos desarrollado una serie de materiales, seminarios y diversas actividades para profundizar en nuestro mensaje de que las normas internacionales ISO son fundamentales para el cumplimiento de los ODS.
Me gustaría llamar la atención sobre el sentido de urgencia. En palabras del Secretario General de Naciones Unidas, António Guterres, si seguimos trabajando a esta velocidad en el año 2030 no seremos capaces de implementar más allá del 50 % de los ODS. Por lo tanto, tenemos que trabajar con mayor seriedad y eficacia, porque este ritmo no es aceptable.
Las normas son el verdadero lenguaje que hablan los mercados internacionales, concediendo a las empresas una ventaja competitiva en el comercio y las exportaciones, eliminando barreras técnicas
¿Qué le diría a una empresa para que aplique estándares en sus procesos y en el conjunto de su forma de actuar?
Lo más importante es que las normas internacionales responden a soluciones globales, desarrolladas por expertos internacionales y basadas en el consenso. Por lo tanto, las empresas que piensan implantar un estándar internacional lo hacen conscientes de que van a cumplir con determinados requisitos y especificaciones que serán comprendidos por los mercados globales.
Las normas son el verdadero lenguaje que hablan los mercados internacionales, facilitando los intercambios y las exportaciones a las empresas. Los estándares contribuyen a la armonización normativa y a la eliminación de barreras técnicas al comercio.
Las normas conceden a las empresas una ventaja competitiva en el comercio internacional: si estas hacen las cosas siguiendo lo establecido en una norma, va a ser comprendido, aceptado y valorado por los mercados destino de sus exportaciones.
Las empresas que aplican las normas internacionales mejoran sus resultados, rentabilidad, eficiencia y procesos.
Estándares y entorno digital; ¿son dos ámbitos conectados?
Sin duda y tiene que ver con el proceso de creación de las normas, pero también con la forma en la que las difundimos y hacemos accesibles.
Respecto al proceso de creación del estándar, tradicionalmente hemos trabajado en los Comités Técnicos de Normalización con reuniones presenciales, en un ambiente cara a cara. Sin embargo, estamos explorando cada vez con más fuerza soluciones digitales ya que en algunas ocasiones son más rápidas y eficientes. Creo que podemos combinar de la manera óptima ambas soluciones.
Desde el punto de vista de difusión y accesibilidad de las normas, quizá hasta hoy hemos puesto el énfasis en el documento y la plataforma que lo contiene.
En el futuro veo un avance más bien hacia el contenido y a que este sea accesible, e incluso interpretable por máquinas. Además, permitiendo combinar las normas ISO con otras normas que pudieran venir de otros organismos internacionales o nacionales. Y lo veo así porque lo que verdaderamente interesa a la empresa o al usuario es que puedan aplicar el conjunto de normas que le son relevantes para su negocio.
En este sentido, ¿qué papel tiene la Inteligencia Artificial?
El uso de la Inteligencia Artificial (IA) para encontrar las palabras clave en las normas y conectarlas de una forma lógica y estructurada para nuestros usuarios puede ser muy importante.
Hay que tener en cuenta que ISO cuenta con 800 comités técnicos y subcomités de normalización y con un catálogo de 22.888 normas, y que, además, otros organismos internacionales también desarrollan estándares muchas veces complementarios a los nuestros.
¿Qué visión tiene del papel de UNE y de la normalización española en el marco de ISO?
La Asociación Española de Normalización, UNE, es un actor fundamental dentro del sistema ISO y está muy presente en sus dos dimensiones más importantes: tanto en los Órganos de Gobierno como en los Comités Técnicos de Normalización.
Respecto al primer ámbito, ISO está formada por 164 países, pero sólo 20 participan en el Consejo Directivo. Los miembros de ISO han elegido a España para formar parte de ese Consejo Directivo, lo que es un honor y un privilegio, a la vez que una gran responsabilidad. Javier García, Director General de UNE, miembro español de ISO, forma parte de este Consejo.
En segundo lugar, me gustaría destacar la participación española en los comités y subcomités técnicos de Normalización de ISO: sobre el 90 % del total de estos órganos técnicos cuentan con representación de expertos españoles, un porcentaje muy alto y satisfactorio.
Esto se debe a la decisión fundamental que toman ustedes como país de participar aportando expertos de empresas españolas para que formen parte activa de estos comités técnicos que elaboran estándares clave para su competitividad. En este sentido, me gustaría agradecer el liderazgo y la participación comprometida de UNE y de su Director General, así como de los distintos expertos españoles de organizaciones que participan en los órganos técnicos de ISO.
Gracias a la participación de expertos de organizaciones de todo el mundo, cada año publicamos unas 1.600 nuevas normas internacionales ISO.
Para que nuestras soluciones sean verdaderamente completas y correctas, necesitamos tener tanto la mirada de las mujeres como la de los hombres
Se acaban de cumplir 20 años de la creación del grupo de traducción de normas al español en ISO. ¿Qué valoración hace de poder disponer de las normas más relevantes de ISO en una versión única en español?
En ISO buscamos que nuestras normas internacionales sean utilizadas en todo el mundo y para ello, es indispensable que las normas se comprendan. Actualmente, nuestros idiomas oficiales son el inglés, francés y ruso.
Esto no significa que no exista una necesidad de extender la utilización de las normas a otras lenguas y, en particular el español, ya que hay una enorme comunidad internacional que habla este idioma. Por eso, es muy positivo disponer de las normas más relevantes de ISO en una versión única en español. En este sentido, valoro la generosidad que ha tenido UNE para liderar este grupo de traducción al español, así como de la gran cantidad de países de habla hispana que participan en ese esfuerzo común.
Más aún con la complejidad técnica de que varios países se pongan de acuerdo para ver cuál es la terminología correcta en español; unos vienen de Chile, y otros de Ecuador, Argentina o España, entre otros; y la verdad es que muchas veces hay divergencias en la manera en que cada uno utiliza una terminología. Ponernos de acuerdo en una nomenclatura única aporta mucho valor para que la norma internacional sea un verdadero lenguaje universal.
En la última Asamblea General de ISO, se ha celebrado la primera reunión del grupo de la ONU para contemplar la perspectiva de género en el desarrollo de las normas, promoviendo principios de inclusión e igualdad. ¿Cómo van los trabajos?
Para mí este es un tema fundamental y tiene que ver con la visión de cómo logramos ser más relevantes y eficientes como organismo internacional. En una primera lectura, se podría pensar que si nosotros buscamos lograr soluciones técnicas, lo que necesitamos son buenos técnicos y, por lo tanto, el género no es relevante. Pero estoy convencido de que esa es una mirada miope, que no alcanza a ver la totalidad del problema, porque para que nuestras soluciones sean verdaderamente completas y correctas, necesitamos tener tanto la mirada de las mujeres como la de los hombres.
El año pasado en el marco de nuestro evento sobre normas como apoyo a los ODS, hicimos un primer ejercicio para abordar el tema de la perspectiva de género. En nuestra reunión de septiembre llevamos una propuesta de Plan de acción que fue aprobada por unanimidad dentro del Consejo de ISO.
Ese Plan de trabajo se basa en tres aspectos fundamentales. El primero es el análisis de la información y recogida de datos. Vamos a ver cuál es la participación de la mujer en nuestros Comités de Normalización y de acuerdo con a esa información podremos tomar decisiones que nos ayuden a mejorar esa representatividad, en caso necesario.
El segundo pilar es realizar una evaluación profesional de cuál es el impacto que tiene la normalización en los temas de género. Como dije, cada año publicamos 1.600 nuevas normas ISO, pero no sabemos si eso tiene un impacto (positivo, negativo o neutro) en los temas de género y, en particular, en la mujer. Además, tenemos que desarrollar mejores herramientas para que aquellos que redactan las normas incorporen la perspectiva de género.
El tercer elemento es recopilar las mejores prácticas internacionales en este tema y hacer un inventario que nos sirva de guía. Hay varios países que están trabajando con mucho éxito y entusiasmo en normas que apoyan la igualdad de género, como Canadá.
Bio
Sergio Mujica es Secretario General de ISO (Organización Internacional de Normalización) desde julio de 2017. Previamente ocupó el cargo de Secretario General Adjunto de la Organización Mundial de Aduanas (OMA) durante siete años. El objetivo de la OMA es mejorar la efectividad y eficiencia de la gestión de las administraciones aduaneras de todo el mundo; Mujica fue responsable del diseño e implementación del plan estratégico de esta organización.
Con anterioridad, trabajó durante 15 años en el Gobierno de Chile, desempeñando diversos cargos en el Ministerio de Agricultura, el Ministerio de Economía y la Autoridad Nacional de Aduanas de Chile, de la que fue Director General.
De nacionalidad chilena, Sergio Mujica es licenciado en Derecho por la Pontificia Universidad Católica de Chile y máster en Derecho Internacional por la Universidad Americana en Washington.
Video. Entrevista a Sergio Mujica, Secretario general de ISO
Subraya el valor diferencial de los estándares para que las organizaciones y la sociedad superen con éxito sus grandes desafíos, en temas como el comercio, la competitividad empresarial, la sostenibilidad o los ODS.