¿Qué se va a normalizar en 2018?

El Plan Anual de Normalización es el instrumento que concreta en una propuesta operativa las actuaciones previstas por los comités nacionales de normalización, que forman parte de la estructura de la Asociación Española de Normalización, UNE. Las normas que anualmente integran el plan constituyen una herramienta fundamental para afrontar los retos a los que se enfrentan los sectores que conforman el tejido empresarial español, contemplándose tanto un enfoque vertical asociado a un producto o servicio determinado, como una perspectiva de carácter trasversal ligada a aspectos de carácter organizacional en el plano más corporativo de las organizaciones.

La nueva visión definida en la Comunicación de la Comisión Europea Normas Europeas para el Siglo XXI va más allá de la forma tradicional de gestionar las normas a escala de la Unión Europea, que hasta ahora se limitaba a facilitar apoyo técnico para las necesidades de armonización de la UE. La nueva visión se centra en la contribución de la normalización para los cambios sociales y para las políticas europeas, como la promoción de la innovación, el aumento de la calidad y la seguridad, el fomento del empleo y del crecimiento, el apoyo para las cadenas de valor mundiales y el desarrollo del mercado único.

Es un hecho que las normas y la normalización desempeñan una función crucial de fomento del crecimiento económico, puesto que estimulan la productividad y la competitividad y promueven la innovación y la prosperidad. Además, ofrecen medios para que la UE mantenga su liderazgo en materia de desarrollo técnico y comercio mundial.

UNE ha publicado su plan de trabajo para 2018, que puede consultarse en www.une.org. Está compuesto de 1.800 proyectos que se convertirán en norma UNE a lo largo de 2018, y ratifica la posición de las normas y la normalización como componentes estratégicos claros para salvaguardar la competitividad de la UE, así como herramientas esenciales para promover la innovación y el progreso en el mercado único.

El catálogo de normas UNE está compuesto por más de 32.000 documentos, de los cuales más del 77 % son, a su vez, normas europeas y casi el 40 % normas internacionales, favoreciendo, por tanto, la internacionalización y el acceso a mercados exteriores. Además, hay que destacar que UNE mantiene un esfuerzo permanente por traducir al español las normas de origen internacional, por lo que se encuentran en nuestro idioma en torno al 80 % del total incluido en el catálogo. Esto proporciona al usuario un encuentro más fácil con los documentos que marcan su actividad.

Se destacan a continuación ejemplos de desarrollos en marcha, que verán la luz a lo largo de 2018, y que ayudarán a conseguir los objetivos a los que se enfrentan organizaciones públicas y privadas en los ámbitos de innovación, calidad y seguridad, digitalización y responsabilidad social.

El uso de las normas de gestión de la innovación en las empresas y organizaciones les empuja a mejorar su capacidad y nivel de desempeño. Ayuda a reconocer y dar valor a aspectos innovadores de su actividad a veces no identificados como tales, a comprender las necesidades del mercado como motores de la innovación, a incrementar y optimizar la colaboración para generar valor y a fomentar la protección y valorización de sus activos intangibles.

El PNE 166006 Gestión de la I+D+i: Sistema de vigilancia e inteligencia tiene por objeto facilitar la formalización y estructuración del proceso de recogida y análisis de información sobre el entorno de la organización para apoyar la toma de decisiones a todos los niveles. Para ello, propone la implantación de un sistema de gestión permanente de la vigilancia y la inteligencia, especialmente enfocadas a las actividades de I+D+i de la organización. Esta futura norma se suma a las 13 elaboradas por el comité CTN 166 Actividades de investigación, desarrollo tecnológico e innovación (I+D+i).

El mercado único digital es uno de los ámbitos más prometedores y más desafiantes del progreso, que crea posibilidades de mejora de la eficiencia por valor de 415.000 millones de euros. Inmersas en este proceso de transformación digital, las organizaciones están realizando grandes inversiones en tecnología para digitalizar sus negocios. Las amenazas inteligentes, empiezan a acaparar protagonismo y a instalarse como una preocupación cuya responsabilidad se hace extensiva en el ámbito corporativo de las organizaciones. La normalización ayuda de manera directa a enfrentar los retos vinculados a esta transformación. Así, a lo largo de 2018 se publicarán varias normas sobre aspectos clave del proceso de digitalización, como son las ciudades inteligentes, la facturación electrónica o las técnicas de modelado BIM.

Requisitos de interoperabilidad para una Plataforma de Ciudad Inteligente y el PNE 178502 Indicadores y herramientas de los destinos turísticos inteligentes. Este último proyecto especifica un conjunto de indicadores y herramientas, asociados a la gobernanza y a los ejes de un destino turístico inteligente (gobernanza, innovación, tecnología, accesibilidad universal, sostenibilidad) para su aplicación en la gestión de los destinos, de forma que sirvan para la toma de decisiones por el ente gestor del destino y por los responsables de los procesos o actividades afectadas y, en consecuencia, contribuyan a la mejora de los destinos. Actualmente, el CTN 178 cuenta con 24 normas publicadas y 29 proyectos en su programa de trabajo.

En respuesta al objetivo planteado por la Comisión Europea de que la facturación electrónica se convierta en el método predominante de facturación para el año 2020, desde 2014, en el seno del Comité Europeo de Normalización (CEN) se ha estado trabajando en el desarrollo de una norma europea que defina el modelo semántico para la Factura Electrónica en el contexto de la Directiva de la UE 2014/55. Se trata del PNE-EN 16931-1 Facturación electrónica. Parte 1: Modelo semántico de datos de los elementos principales de una factura electrónica que, a lo largo del 2018, se adoptará como norma UNE bajo la responsabilidad del comité CTN 312 Facturación electrónica en la contratación pública.

El presente y futuro de la gestión de trabajos de edificación y obra civil pasa por el uso del BIM (Building Information Modeling), metodología de trabajo colaborativo que emplea un modelo digital en 3D ampliamente surtido de metadatos. Se estima que el uso del BIM podría reducir en un 20 % los costes y la huella de carbono en las etapas de construcción y uso del entorno construido. En este ámbito, se está trabajando en el PNE-EN ISO 29481-1 Modelado de la información de los edificios. Manual de entrega de la información. Parte 1: Metodología y formato. Su objetivo es facilitar la interoperabilidad entre las aplicaciones de software empleadas en todas las fases del ciclo de vida de los trabajos de construcción, incluyendo el programa, diseño, documentación, construcción, operación y mantenimiento, y demolición; y promover la colaboración digital entre los agentes del proceso de construcción, proporcionando una base para un intercambio de información preciso, fiable y repetible de alta calidad, está en proceso de adopción nacional la futura.

Las normas elaboradas por el comité CTN 192 Inspección Reglamentaria establecen unos modelos de inspección para cada una de las distintas actuaciones que han de realizar los Organismos de Control (OC). Su marco legislativo lo constituye el Real Decreto 1072/2015, por el que se aprueba el Reglamento de la Infraestructura para la Calidad. Las normas técnicas desarrolladas en este comité pretenden convertirse en herramientas de apoyo a los reglamentos de seguridad industrial, sus instrucciones y guías técnicas.

En 2018 se incorporarán al catálogo de normas UNE, seis normas de apoyo a los reglamentos de seguridad industrial en lo que respecta a instalaciones de baja tensión y equipos a presión. Se trata del PNE 192007-2-12. Procedimiento para la inspección reglamentaria. Instalaciones eléctricas de baja tensión. Parte 2-12: Instalaciones comunes en edificios de viviendas; PNE 192007-2-28 Procedimiento para la inspección reglamentaria. Instalaciones eléctricas de baja tensión. Parte 2-28: Locales de pública concurrencia; PNE 192011-0 Procedimiento para la inspección reglamentaria. Equipos a presión. Parte 0: Requisitos generales; PNE 192011-4 Procedimiento para la inspección reglamentaria. Equipos a presión. Parte 4: Requisitos específicos para depósitos criogénicos; PNE 192011-5 Procedimiento para la inspección reglamentaria. Equipos a presión. Parte 5: Requisitos específicos para botellas de equipos respiratorios autónomos; y PNE 192011-6 Procedimiento para la inspección reglamentaria. Equipos a presión. Parte 6: Requisitos específicos para recipientes a presión transportables. Centros de recarga de gases.

En Plan Anual de Normalización también existen proyectos en desarrollo para ámbitos como las aplicaciones ferroviarias, sistemas de lucha contra incendios, piedra natural, envases y embalajes, maquinaria agrícola, óptica o edificación.

Hace ya mucho tiempo que las normas voluntarias vienen aportando soluciones en áreas de gestión y mejora de procesos, buenas prácticas de gobierno, etc. En el Plan Anual de Normalización 2018 hay que destacar proyectos en desarrollo en la vertiente ambiental y social.

Como se recoge en el Plan de acción de la UE para la economía circular, se hace necesaria la existencia de normas de calidad para las materias primas secundarias. La meta es reforzar la confianza de los operadores en el mercado interior, así como el desarrollo de normas sobre la eficiencia en el uso de los materiales con vistas al establecimiento de futuros requisitos de diseño ecológico sobre la cualidad de durable, reparable y reciclable de los productos, eficiencia energética, adaptación y mitigación del cambio climático, etc. La Estrategia Española de Economía Circular (EEEC) incorpora estas medidas dentro de su primer eje de actuación Producción y Diseño. Concretamente la Acción 3 está dedicada al desarrollo de normas europeas de ecodiseño y economía circular y se desarrolla en torno al apoyo de trabajos de normalización concretos.

El programa de trabajo de normalización para 2018 cuenta entre sus proyectos con varias propuestas colaterales a las citadas medidas: PNE 14055-1 Gestión ambiental. Directrices para el establecimiento de buenas prácticas para combatir la degradación de la tierra y la desertificación. Parte 1: Marco para las buenas prácticas; PNE-EN 16757 Sostenibilidad de las obras de construcción. Declaraciones ambientales de producto. Reglas de Categoría de Producto para hormigón y elementos de hormigón; PNE-EN 50645 Requisitos de ecodiseño para transformadores de pequeña potencia; y PNE 216701 Clasificación de proveedores de servicios energéticos.

En cuanto a la accesibilidad, cuestiones como la consideración de las necesidades de las personas con discapacidad, así como garantizar a la población el efectivo disfrute de un envejecimiento activo, encuentran apoyo en la normalización como vía para contribuir a lograr la igualdad de los ciudadanos y el efectivo ejercicio de sus derechos. UNE tiene una larga trayectoria de desarrollo de estándares de accesibilidad, siempre con el apoyo de los principales interlocutores nacionales, tanto en el ámbito nacional como europeo e internacional. Y para mantener este compromiso en este año se unirá a las normas ya publicadas sobre materias como accesibilidad TIC, accesibilidad del entorno construido, subtitulado en lengua de signos, audiodescripción, sistemas de gestión de la accesibilidad o la accesibilidad web, la futura norma PNE 153101 EX Lectura fácil. Pautas y recomendaciones para la elaboración de documentos, que especifica directrices para la adaptación, creación y validación de documentos en lectura fácil, aplicándose a textos y documentos escritos, independientemente del soporte en el que se presenten.

Los servicios, generadores del 70 % del PIB mundial, son el sector con mayor velocidad de crecimiento, primer generador de empleo y comercio en todo el mundo, tanto en los países desarrollados como en vías de desarrollo. Las normas voluntarias pueden ayudar a construir un verdadero Mercado Único en el campo de los servicios, igual que lo han hecho para productos, facilitando la contratación de servicios y el establecimiento de entidades proveedoras en otros países. La normalización no es ajena a este escenario y continua en 2018 incorporando propuestas en el campo de los servicios trabajando en los proyectos PNE-ISO/IEC TR 17028 IN Evaluación de la conformidad. Ejemplo de un esquema de certificación para servicios; PNE-EN 14534 Servicios postales. Calidad del servicio. Medición del plazo de entrega de servicios extremo a extremo para correo masivo; PNE-ISO 13687-1 Turismo y servicios relacionados. Puertos Deportivos. Parte 1: Requisitos mínimos para puertos con servicios de nivel básico; PNE-ISO 13687-2 Turismo y servicios relacionados. Puertos deportivos. Parte 2: Requisitos mínimos para puertos con servicios de nivel intermedio; y PNE-ISO 13687-3 Turismo y servicios relacionados. Puertos deportivos. Parte 3: Requisitos mínimos para puertos con servicios de nivel alto.

Más información goo.gl/RrS3PZ

La publicación del Plan Anual de Normalización tiene un valor que trasciende un programa de trabajo. Al estar elaborado con las aportaciones de los expertos de distintos ámbitos, que desarrollan su labor en los 215 Comités Técnicos de Normalización, constituye una fotografía de inquietudes y campos en los que quiere progresar el tejido económico español.

Ahí vemos cuestiones como la digitalización o la calidad y la seguridad, donde la Secretaría General de Industria y la Pyme viene trabajando junto a los sectores. De entre las aportaciones fruto de esa labor quisiera destacar el Marco Estratégico de la España Industrial 2030. Este trabajo se encuentra en su última fase de borrador, tras recoger las aportaciones de los distintos agentes y tiene como objetivo primordial mejorar la competitividad de la industria.

En este documento, se contempla la necesidad de un trabajo coordinado tanto en el desarrollo como en la aplicación de estándares. En el despliegue de la Industria 4.0, son un elemento esencial para que las empresas tengan la certeza de la interoperabilidad. Uno de los grandes retos a los que se enfrenta nuestra industria está precisamente en no perder el paso tecnológico, desarrollando nuevos servicios y productos más inteligentes.

Esta visión de las normas o estándares es coherente con su creciente papel en la vida económica; destacadamente como apoyo para el despliegue de políticas en campos como la promoción de la innovación o el aumento de la calidad y la seguridad, tal como ha expresado recientemente la Comisión Europea.