Cooperación internacional

Una de las actividades de referencia de la Asociación Española de Normalización, UNE, es la cooperación internacional. Esta actividad se desarrolla a través de proyectos de asistencia técnica orientados a fortalecer las capacidades institucionales del personal de las organizaciones de la infraestructura de la calidad en países con economías emergentes, promoviendo las políticas internacionales de la Unión Europea y de España, y armonizando los requisitos de acceso a otros mercados.

El refuerzo de las capacidades y aptitudes se lleva a la práctica a través de formaciones, seminarios, visitas de estudio, talleres, estudios, informes y análisis realizados por expertos, asesores y consultores, que trabajan con el personal de las instituciones del país beneficiario a todos los niveles. El objetivo no es trasladar y replicar las experiencias europeas, sino proporcionar recomendaciones, opciones y alternativas basadas en prácticas refrendadas que sirvan de base para la toma de decisiones y el desarrollo de planes de trabajo eficaces que se materialicen en el progreso y el crecimiento sostenido y sostenible del país beneficiario.

Dotar a los países en desarrollo de sistemas de infraestructura de la calidad operativos y sólidos, promoviendo la armonización de las normas técnicas, fomentando la protección al consumidor mediante la vigilancia de mercado, poniendo en el mercado productos seguros, es clave para la eliminación de las barreras técnicas al comercio. En esta línea, los proyectos de cooperación en los que UNE trabaja son financiados en su mayoría por entidades multilaterales, especialmente por la Unión Europea, a través de la Dirección General de Cooperación Internacional y Desarrollo (DG DEVCO), mediante los proyectos EuropeAid. La Comisión Europea implementa varios Instrumentos de Financiación Geográfica. El primero es el Instrumento de Ayuda de Preadhesión

(IPA - Instrument for Pre-Accession Assistance), que proporciona asistencia a países para convertirse en miembros de la UE (es el caso de la Antigua República Yugoslava de Macedonia, Turquía, Croacia y la región de los Balcanes –Albania, Serbia, Kosovo, Bosnia-Herzegovina y Montenegro–).

El segundo es el Instrumento Europeo de Vecindad (ENI-European Neighbourhood Instrument), encargado de financiar la Política Europea de Vecindad que incluye la cooperación con los países del sur del Mediterráneo (Argelia, Egipto, Líbano, Libia, Jordania, Israel, Marruecos, Siria, Túnez y Palestina) y los países del Este (Armenia, Azerbaiyán, Bielorrusia, Georgia, Moldavia y Ucrania). Los fondos del ENI se emplean en programas regionales, proyectos bilaterales o proyectos dirigidos a la cooperación institucional entre las Administraciones Públicas; ejemplos de ello son los hermanamientos (twinnings) y a las actividades TAIEX de asistencia técnica e intercambio de información. La Política Europea de Vecindad se fundamenta en el artículo 8 del Tratado de la Unión Europea, que señala que “la Unión desarrollará con los países vecinos relaciones preferentes con el objetivo de establecer un espacio de prosperidad y de buena vecindad basado en los valores de la Unión y caracterizado por unas relaciones estrechas y pacíficas fundadas en la cooperación”. La UE también apoya a países en vías de desarrollo en América Latina, Caribe, Asia, Pacífico y África mediante programas regionales o nacionales.

Un pilar capital de la política exterior de la UE son los Acuerdos de Asociación utilizados para promover los valores y principios europeos (derechos humanos, democracia, defensa del medio ambiente). Destacan los Acuerdos de Asociación Económica y los Acuerdos de Libre Comercio que abren mercados entre países desarrollados y economías emergentes. Los proyectos de asistencia técnica ayudan a cimentar estos Acuerdos de Asociación. Algunos ejemplos de ello son los proyectos en los que UNE ha trabajado en el marco de los Acuerdos de la UE con México, Centroamérica o Georgia (proyectos PROTLCUEM, PROCALIDAD, PRACAMS, PAAPIR). En la actualidad UNE implementa proyectos de cooperación para apoyar el Acuerdo de la UE con Centroamérica a través de las asistencias técnicas PRAIAA sobre formación y capacitación, ADESEP que apoya al desarrollo del sector privado y NITA sobre estrategias de cooperación.

UNE participa en proyectos que cubren diversas áreas y sectores de actividad, desarrolla la gestión de un proyecto en el ámbito global o en consorcio uniendo fuerzas con otras entidades, involucrándose de forma activa en las fases de identificación, formulación y ejecución. Estos proyectos abarcan diferentes áreas: normalización, reglamentos técnicos, metrología, ensayos de laboratorio, acreditación, evaluación de la conformidad, vigilancia de mercado, protección al consumidor, facilitación del comercio, reforma institucional, competitividad o apoyo al sector privado. Y se desarrollan en todos aquellos sectores clave para la industria española: agroalimentario, eléctrico, construcción, maquinas, energía, sistemas de gestión, turismo, servicios o materiales, entre otros.

Además de los proyectos mencionados anteriormente, dentro de la cartera de proyectos activos de UNE pueden destacarse los siguientes:

• Appui Spécifique à la Surveillance et l’Encadrement du Marché (PASSEM) Argelia
• Gestion des produits chimiques dangereux et des déchets biologiques dans la région de la Façade Atlantique de l’Afrique
• Support to the free movement of goods in Kosovo
• Quality Infrastructure in the Western Balkans
• Medidas de Apoyo al Desarrollo Institucional y la Gestión de Políticas Públicas (MADIGEP), Honduras

UNE, además de los proyectos financiados por la Unión Europea, atiende también a otros organismos multilaterales de financiación, como el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y el Banco Mundial (WB) y fondos de cooperación bilateral como los de la Agencias de cooperación española (AECID), sueca (SIDA) o alemana (GIZ). Igualmente UNE, liderando y promoviendo la cultura de la normalización en el mundo, pone a disposición de la Organización Internacional de Normalización (ISO) su experiencia en gestión, operación y estrategia, impulsando su Plan de Acción para los Países en Desarrollo 2016-2020.

Las instituciones españolas pioneras en implantar las políticas europeas son un ejemplo que pueden seguir las entidades homólogas de terceros países. Por ello participan en numerosos proyectos, trasladando buenas prácticas y reglamentaciones armonizadas implantadas. Del mismo modo, la industria española, innovadora en el desarrollo de nuevos productos, procesos y servicios, puede hacer uso de la cooperación como vehículo trasmisor para difundir y dar visibilidad a su experiencia, para que sus productos sean un referente en mercados globales dando un paso más hacia adelante en su internacionalización.

En definitiva, la cooperación internacional es la base para la transferencia del conocimiento, el fortalecimiento de las capacidades de las instituciones, la armonización de los mercados, que promueve la innovación, la competitividad, el progreso y los intercambios comerciales.