Nuevo estándar global para gestionar la innovación

La Organización Internacional de Normalización (ISO) publicó el pasado 10 de septiembre la Norma ISO 56001:2024 Sistema de gestión de la innovación. Requisitos, marcando un hito sin precedentes en el calendario de la innovación mundial. Se trata de la primera norma internacional de requisitos, y por tanto certificable, para un sistema de gestión de la innovación. Ha sido adoptada como norma europea EN ISO 56001 y estará disponible en el catálogo nacional de UNE en los primeros meses de 2025.

La Norma ISO 56001 se ha elaborado en el Comité Técnico Internacional de Normalización ISO/TC 279 Innovation management, en el que participan expertos en materia de innovación de 57 países de los cinco continentes. Fruto de este trabajo colectivo es este estándar que responde a un amplio consenso de la comunidad internacional y tiene como principal objetivo proporcionar un marco estructurado que permita a las organizaciones establecer, implementar, mantener y mejorar un sistema de gestión de la innovación. La Norma ISO 56001 está diseñada para ser flexible y aplicable a todo tipo de organizaciones, independientemente de su tipo, tamaño o de los productos y servicios que suministren, ofreciendo un enfoque sistemático para promover y gestionar la innovación.

La ISO 56001 forma parte de la familia de Normas ISO 56000, que se centran en la gestión de la innovación. La serie ISO 56000 incluye diez documentos normativos que abordan aspectos como la gestión de ideas, las alianzas en innovación, la gestión de la inteligencia estratégica, la medición de las operaciones de innovación o la gestión de la propiedad intelectual, entre otros.

En este complejo contexto, la Norma ISO 56001 se presenta como una herramienta clave para ayudar a las organizaciones a gestionar estos cambios. Esta Norma proporciona, mediante un enfoque sistemático que promueve la creatividad y la mejora continua, un instrumento para estructurar la función de innovación reduciendo la incertidumbre y aumentando la probabilidad de obtener beneficios significativos de los nuevos productos, servicios, procesos y modelos, alineando la innovación con los objetivos estratégicos de la organización con un enfoque muy orientado hacia la creación de valor

Ambas Normas comparten una filosofía de mejora continua e introducen requisitos similares siguiendo una estructura análoga. Sin embargo, presentan ciertas divergencias en cuanto a su enfoque.

La Norma ISO 56001 se centra en la gestión de la innovación en un sentido más amplio. Propone un ciclo de innovación que incluye la identificación de oportunidades, generación de ideas y su implementación, pero sin profundizar tanto en la gestión de proyectos específicos. Su enfoque flexible permite que las organizaciones adapten el marco a diferentes tipos de proyectos y contextos.

Asimismo, la Norma ISO 56001 es menos específica en algunos aspectos como la Vigilancia Tecnológica, remitiendo para esta cuestión a la Norma ISO 56006. En cuanto a las estructuras organizacionales, no menciona las estructuras contempladas en la UNE 166002: Unidad de gestión de I+D+i y Unidad de I+D+i; o los requisitos para formalizar las colaboraciones.

Además, esta Norma enfatiza la importancia del compromiso de la alta dirección en la creación de una cultura que fomente la innovación. Los líderes deben inspirar y motivar a sus equipos, asegurando que todos comprendan la importancia de la innovación para el éxito organizacional.

Si bien la transición a la ISO 56001 va a requerir una cierta adaptación de los sistemas de gestión de la I+D+i conformes con la UNE 166002. La evolución hacia una evaluación de la conformidad reconocida internacionalmente es, sin duda, un importante paso adelante que compensará el esfuerzo y beneficiará las necesidades organizacionales y reputacionales de los usuarios.

La aplicación de la Norma ISO 56001 en las organizaciones reportará ventajas significativas. A continuación se compendian las más destacables.

Sistematización de la innovación. La Norma ISO 56001 proporciona un marco estandarizado que permite a las organizaciones adoptar un enfoque coherente y sistemático hacia la innovación. Esto es especialmente importante en un entorno empresarial cada vez más complejo y dinámico. En muchas organizaciones, la innovación se produce en compartimentos estancos: la alta dirección tiene poca visibilidad del proceso y las unidades de negocio apenas comparten las mejores prácticas. La creación de un lenguaje común y coherente para describir la terminología de la innovación facilita compartir lo aprendido y acelerar la creación de valor.

Reconocimiento internacional. La Norma ISO 56001, elaborada por consenso internacional en el ISO/TC 279, se basa en experiencias colectivas, es objetiva y proporciona una terminología y unos principios que nacen de un entendimiento común. Respaldada por ISO, esta Norma supone un avance en materia de reconocimiento internacional para la evaluación de la conformidad de sistemas de innovación, con una acreditación que será reconocida y reconocible en todo el mundo. 

Integración con otros sistemas de gestión normalizados. Sigue una estructura armonizada basada en la estructura de alto nivel de las normas ISO, lo que facilita su integración con otros sistemas de gestión. Las organizaciones podrán alinear o integrar su sistema de gestión de la innovación con otros sistemas de gestión implantados de una manera muy cómoda, para aprovechar las sinergias y mejorar la eficiencia general de la gestión.

Mejora de la reputación. La evaluación de la conformidad de acuerdo con la Norma ISO 56001 ofrecerá garantías hacia el exterior sobre la capacidad de generar valor a través de la innovación por parte de las organizaciones acreditadas, atrayendo a más clientes y socios, así como dando seguridad a los inversores que deseen financiar empresas reconocidas por su gestión de la innovación.

Sostenibilidad. En un contexto mundial donde la sostenibilidad se ha convertido en un aspecto fundamental, la Norma ISO 56001 también incorpora esta cuestión en su redacción e injiere cómo las iniciativas de innovación pueden contribuir a un futuro más sostenible.

Innovar es una prioridad acuciante y un objetivo recurrente en cualquier discurso político, empresarial, académico y social. El propio informe Draghi centraba hace unas semanas el foco en la necesidad urgente de Europa de innovar y recuperar posición estratégica competitiva.

Sin embargo, poco se conoce sobre el proceso de cómo innovar de manera eficaz y eficiente mediante un enfoque estructurado y sistémico para fomentar la competitividad, abrazar la doble transición digital y verde contribuyendo al crecimiento sostenible, tanto desde el punto de vista económico, social y medioambiental.

En los próximos cinco años enfrentamos como sociedad un proceso vertiginoso de cambio de paradigma impulsado por las nuevas tecnologías, la geopolítica y los cambios en los consumidores y desafíos asociados al cambio climático, disrupciones que obligan a la gran mayoría de las empresas a innovar a veces incrementalmente, otras radicalmente y, en muchos casos, de modo colaborativo.

La pregunta del millón es cómo innovar, generar confianza en un entorno muy dinámico con transformaciones profundas que reconfiguran las cadenas de valor en todos los sectores. La normalización tiene mucho que aportar para generar confianza en este contexto. Evaluar la conformidad del sistema de gestión de la innovación en el ámbito internacional ahora es posible con la publicación de la Norma ISO 56001. Se trata, sin duda, de un activo clave para reducir la incertidumbre, atraer inversores y clientes, gestionar portfolios de innovación y facilitar la colaboración con terceros a través de procesos compartidos en un marco común de gestión de la innovación.

La publicación de la Norma internacional ISO 56001 certificable es una grata noticia para TECNALIA como Centro Tecnológico (CCTT) perteneciente a la Red Vasca de Ciencia y Tecnología e Innovación (RVCTI).

TECNALIA, en su estrategia de mejora de impacto científico-tecnológico, ha apostado por una excelencia en la gestión de su I+D+i. Así, fue pionero en la adopción de la Norma UNE 166002 para su Sistema de Gestión de I+D+i. Diseña sus procesos de I+D+i en base a las Normas de la familia UNE 166000 y de la familia ISO 56000. Y mantiene una participación activa en Comités Técnicos de Normalización en los que se desarrollan algunas de estas Normas.

Debido a este posicionamiento, tenemos un Sistema de gestión de I+D+i robusto y adaptable a las necesidades de un CCTT. La nueva Norma ISO 56001 ofrece una doble oportunidad: adecuar nuestro sistema a lo que está demandando la comunidad internacional y tener un reconocimiento sin fronteras de dar respuesta a esa demanda.

Adoptar un enfoque sistémico de la gestión de la I+D+i es fundamental; y embeber la innovación en la cultura organizacional es crítico. Alineamos nuestras capacidades tecnológicas con la estrategia de la organización, con un modelo de liderazgo basado en una cultura de innovación y con una gestión del riesgo inherente a la incertidumbre de la innovación basadas en datos. El éxito de la organización se hace sostenible en el tiempo creando valor con los resultados de I+D+i.