Los países de la región de los Balcanes se encuentran en un proceso de cambio y desarrollo económico con unas tasas de crecimiento en torno al 3,5 %. Albania, Bosnia y Herzegovina, Kosovo1, la Antigua República Yugoslava de Macedonia, Montenegro y Serbia han firmado acuerdos de Asociación y Estabilización con la Unión Europea (UE) que incluyen Acuerdos de Libre Comercio, forman parte de la Comunidad Europea de Energía y constituyen un mercado de más de 18 millones de personas. Además, son potenciales candidatos para la adhesión a la UE, que ha invertido para desarrollar la conectividad con la región tanto en el transporte e infraestructuras, como en la agenda digital.
En línea con esa evolución, desde el año 2015 la región de los Balcanes ha sido beneficiaria de un proyecto de cooperación, sobre Infraestructura de la Calidad, financiado por la Agencia Sueca Internacional de Cooperación al Desarrollo (SIDA) y la Asociación Europea de Libre Comercio (EFTA) con un objetivo clave: fortalecer las capacidades de las instituciones para sentar las bases de la integración económica con la UE y EFTA, y el desarrollo de una economía de mercado en la región. El proyecto ha sido coordinado por el Comité Europeo de Normalización (CEN), desde sus oficinas de Bruselas, y gestionado desde la oficina del proyecto abierta en Belgrado por un líder de proyecto y expertos principales de largo plazo en reglamentos técnicos, normalización, acreditación, evaluación de la conformidad, metrología, industria y eliminación de barreras técnicas al comercio.
Son muchas las instituciones que se han beneficiado del proyecto en los países de la región que al mismo tiempo han sido protagonistas, estando involucradas y siendo parte activa, esencialmente aquellas relacionadas con la infraestructura de la calidad de cada país: los ministerios encargados de realizar la transposición de los Reglamentos y Directivas y de designar los organismos de evaluación de la conformidad; los centros de metrología responsables de la metrología legal y de las directivas MID (instrumentos de medida) y NAWI (instrumentos de pesaje de funcionamiento no automático), responsables también del sistema metrológico para calibración de laboratorios; los organismos de normalización que adoptan y traducen las normas armonizadas; las entidades de acreditación encargadas de los esquemas de acreditación y la evaluación de las entidades de certificación; y las autoridades responsables de la vigilancia de mercado encargados de velar por la seguridad de los productos puestos en el mercado. Se espera que de manera paulatina se den los pasos para que estas entidades nacionales se integren en las entidades europeas e internaciones correspondientes.
La industria ha jugado asimismo un papel relevante, fabricantes, importadores y exportadores de la región deberán cumplir los requisitos de la futura legislación que se transponga, progresando y adaptándose al nuevo sistema, para poner sus productos en el mercado de una manera segura, con la confianza de los usuarios y consumidores de la región y de la UE.
El proyecto ha basado sus actividades en la formación y la capacitación, fundamentalmente a través de seminarios, formación de formadores, talleres y eventos de networking, que se han centrado en dos sectores económicos prioritarios en la región: los productos de construcción y los equipos eléctricos y electrónicos. Por ello, las formaciones han puesto el foco en el Reglamento de Productos de Construcción y las Directivas de Baja Tensión y Compatibilidad Electromagnética.
Estas actividades las han llevado a cabo expertos e instituciones de la UE y EFTA, entre ellos miembros de CEN (organismos nacionales de normalización) entre los que han destacado la Asociación Española de Normalización, UNE, como uno de los actores plenamente involucrados.
Uno de los puntos que hay que evaluar para la Adhesión a la UE de un país es su grado de cumplimiento de los requisitos del Acervo comunitario (EU Acquis). De los 35 capítulos existentes, este proyecto se ha centrado en apoyar a los países beneficiaros en el denominado Capítulo 1 del EU Acquis, dedicado al libre movimiento de mercancías. Se trata de eliminar las barreras técnicas y facilitar el comercio. Para poder cumplir con este capítulo, los países candidatos deben principalmente transponer la legislación de producto armonizada, además de contar con la capacidad administrativa para aplicar los procedimientos relativos a normalización, evaluación de la conformidad, acreditación, metrología y vigilancia de mercado.
La Comisión Europea es la encargada de evaluar los progresos de los países en el cumplimiento del EU Acquis. Al final de este proyecto, en diciembre de 2018, la evolución de cada país se encuentra en diferentes estadios. Mientras que algunos países han progresado y se considera que están moderadamente preparados, otros se encuentran en etapas tempranas de preparación debido fundamentalmente a puntos de partida diferentes.
El desarrollo y la evolución son tangibles. Pero estos son sólo los primeros pasos de un camino hacia el crecimiento sostenido y sostenible de la región que, sin duda, necesita de futuros proyectos e iniciativas que den continuidad a los progresos hacia la eliminación de las barreras técnicas y la armonización de los mercados, y que permita el flujo de productos entre la región y la UE en ambos sentidos.