Entrevistamos al secretario general de ISO, Sergio Mujica, con motivo de su visita a España. Sergio Mujica destaca la alta participación y el liderazgo de UNE y de los expertos españoles en los órganos de gobierno y técnicos de ISO. Además, explica los ejes de la Estrategia ISO 2030, que busca hacer la vida de las personas más fácil, segura y mejor a través de las normas.
Fotografías: Ana Morales (El Economista)
¿Cuáles son los ejes principales de la Estrategia de ISO 2030?
La Estrategia de ISO 2030 está completamente alineada con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030 de Naciones Unidas y, por eso, tiene un enfoque 100 % centrado en las personas; porque estamos convencidos de que a través de las normas ISO podemos hacer su vida más fácil, segura y mejor.
En concreto, estamos trabajando en una agenda transformadora de toda la cadena de valor de la normalización: desde la manera en la que capturamos las necesidades globales para iniciar un nuevo proceso de normalización, hasta la forma en la que escribimos las normas utilizando tecnología, pasando por cómo ponemos a disposición de los usuarios las normas ISO para que tengan una experiencia más fácil y amigable en su acceso online.
En términos de contenido, nuestras dos prioridades están asociadas a los ámbitos de la sostenibilidad, el medio ambiente y el cambio climático, así como a la inteligencia artificial.
¿Por qué son importantes los estándares ISO para las empresas y los gobiernos? ¿Qué beneficios tienen?
Las normas internacionales tienen como propuesta de valor fundamental hacer una invitación a la excelencia; capturan la mejor práctica internacional expresada en una conversación entre expertos que toman decisiones por consenso, con transparencia, inclusividad y dando voz a los países.
Y esta mejor práctica internacional puede ser utilizada por las empresas no solamente para obtener un certificado que acredite el cumplimiento de la norma, sino también para mejorar todos sus procesos internos y, por tanto, su competitividad y crecimiento económico; en este sentido, las normas tienen beneficios económicos para las empresas y las economías. Además, las normas facilitan a las empresas el acceso a los mercados internacionales y la exportación de sus productos y servicios, ya que son la base del comercio mundial, estableciendo unas reglas de juego comunes para todos. A esto hay que añadir que les permiten generar una mayor confianza ante los consumidores.
La transformación digital es un fenómeno global. ¿Qué están haciendo en ISO tanto en el modelo de producción de normas como en el desarrollo de estándares globales en este ámbito?
En primer lugar, lo que estamos haciendo es abordar una transformación digital de nosotros mismos como ISO. Eso se expresa en la manera en la que escribimos las normas, incorporando la tecnología; y también en cómo ofrecemos estas normas a los usuarios de forma online para que sean más accesibles y fáciles de usar.
Respecto al desarrollo de normas, estamos intentando proporcionar buenas prácticas a todas las organizaciones, ya sean de gobiernos, el sector privado, grandes corporaciones o incluso pymes, para acompañarlas durante su propia transformación digital.
"Las prioridades de la Estrategia ISO 2030 están asociadas a los ámbitos de la sostenibilidad, el medio ambiente y el cambio climático, así como a la inteligencia artificial"
Se ha publicado el primer estándar global para facilitar a las organizaciones la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 de Naciones Unidas, fruto de la Alianza entre ISO y la ONU. ¿Cómo ayudan las normas al éxito de los ODS?
Tenemos que entender que si queremos tener éxito en la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030 de Naciones Unidas, no podemos trabajar de manera aislada, sino que debemos unir fuerzas con otros organismos.
En este contexto, hemos establecido una alianza estratégica con Naciones Unidas, de la que nos sentimos muy orgullosos, para facilitar a las organizaciones la consecución de los ODS. Fruto de este acuerdo, se ha publicado la primera Norma global que contiene las directrices para ayudar a las organizaciones de todo el mundo a la consecución de los ODS. Es una guía práctica que va a acompañar el esfuerzo de todas las 0rganizaciones, permitiendo pasar de la alineación a la acción.
¿Qué valoración hace del papel de UNE y de la normalización española en el marco de ISO? ¿Cómo es la participación española?
UNE tiene un papel de claro liderazgo dentro del sistema ISO, estando en sus dos dimensiones más importantes: tanto en los órganos de gobierno como en los órganos técnicos.
En la primera de ellas, el director general de UNE, Javier García, es el vicepresidente de Gestión Técnica de ISO, habiendo sido reelegido recientemente para un nuevo mandato de dos años.
En el ámbito técnico, España participa en prácticamente el 90 % de los comités técnicos de normalización de ISO, un porcentaje muy alto y satisfactorio y esto es muy importante. Además, los expertos de empresas españolas lideran medio centenar de órganos técnicos de normalización internacionales en ISO, que desarrollan normas en campos como TIC, junto a IEC (ciberseguridad o identificación personal mediante biometría), turismo, accesibilidad, aceites esenciales, calzado, combustibles, construcción, estudios de mercado, igualdad de género o gobierno corporativo, entre otros.
Les agradezco este liderazgo y el compromiso de UNE y de su director general, Javier García. Les invito a continuar con esta participación tan destacada, una decisión que toman ustedes como país, aportando expertos de organizaciones españolas que lideran el desarrollo de normas clave para su competitividad.
Se cumplen 25 años de la creación del grupo de trabajo de traducción de normas al español en ISO ¿Cuál ha sido su principal aportación a la comunidad hispanohablante en el mundo?
En primer lugar, quiero trasmitir mi más sincera enhorabuena al STMG (Spanish Translation Management Group) por estos 25 años de vida. Este grupo de trabajo, creado en 1999 con motivo de la traducción de la Norma ISO 9001, ha tenido un papel fundamental en el cumplimiento de dos objetivos estratégicos de ISO.
El primero es que las normas puedan ser aplicadas en todos los lugares del mundo, porque una norma no sirve si no puede ser comprendida e implementada por sus usuarios; y para ello la barrera idiomática es muy importante. El segundo es dar voz a todas las comunidades del mundo, incluida la hispanohablante; de esta manera, pueden participar en la creación de normas y luego implementarlas en sus países.
Gracias al trabajo de este grupo, más de 600 millones de hispanohablantes tienen acceso a las versiones oficiales en español de las normas ISO. Estas versiones ofrecen cohesión lingüística en toda la comunidad que habla este idioma.
Agradezco el esfuerzo de este grupo, que vela por la calidad y coherencia de los textos en español de las normas ISO, y les invito a seguir trabajando, porque de otra manera es imposible hacer realidad nuestros objetivos estratégicos.