La Asociación de Distribuidores de Energía Eléctrica (CIDE) está integrada por 190 compañías que dan servicio a dos millones de personas en medio millón de hogares de la España rural. Así, su labor juega un papel clave para impulsar la transición ecológica en las zonas rurales.
La normalización en el sector energético aporta armonización y homogenización en el uso de los equipos por parte de todos los agentes. La estandarización de criterios transversales es clave para el correcto funcionamiento del sector energético. En el sector de la distribución de energía eléctrica, intervienen otros actores (instaladores, ingenieros, verificadores, organismos de Control OCA…) y tener unas normas homogéneas garantiza que la construcción de las instalaciones cumpla los mínimos de calidad y seguridad.
Es prioritario que todos los agentes cumplan los mismos criterios siguiendo procedimientos armonizados que aseguren el correcto funcionamiento del sector y la seguridad de suministro.
En el mismo sentido, es fundamental la importancia de las normas en la seguridad industrial y el papel que juegan organismos de control (OCA), aportando garantías de que los equipos que se utilizan han superado pruebas y controles normalizados, cuestión relevante en la distribución de energía eléctrica, donde debemos garantizar que el suministro electrico se proporcione con calidad y seguridad.
Para nuestra actividad que es la distribución de energía eléctrica, destacaría las normas UNE relacionadas con el transporte y distribución de energía eléctrica, las relacionadas con el suministro de energía eléctrica en concreto con la calidad de suministro, y la digitalización de las redes y la ciberseguridad.
Podríamos resaltar la relevancia de los trabajos realizados por el Comité UNE Transporte y distribución de energía eléctrica (CTN-UNE 207), que tienen un alto impacto en nuestro sector. En el caso de las redes eléctricas, es importante que la implantación de redes inteligentes se haga bajo normas UNE que sean homogéneas. Asimismo, es importante que las redes sean seguras, por ello es relevante normas relacionadas con la ciberseguridad.
Dentro de UNE se trabajan distintas iniciativas europeas, como pueden ser los códigos de red de ciberseguridad y respuesta a la demanda. Es clave seguir de cerca estas iniciativas y mantenernos al tanto de todos los avances y propuestas que se hacen en el ámbito europeo, ya que tendrán un impacto directo en nuestro funcionamiento.
Actualmente, la Asociación de Distribuidores de Energía Eléctrica (CIDE) participa en UNE a través de diversos foros como la Junta Directiva, el Foro de Energías renovables o algunos Comités Técnicos de Normalización.
En el tiempo que llevamos en UNE, nuestro balance es muy positivo. Consideramos importante que existan estándares y normas en la construcción y en los equipos, pues esto nos lleva a construcciones más eficientes y de calidad. Además, la homologación y evaluación de la conformidad son clave para garantizar el uso de calidad de los equipos en redes de distribución.
Es importante para el sector y para la sociedad tener un marco normativo armonizado y transversal que considere a los distintos agentes y sus actividades.
La transición energética va a suponer desarrollar más las redes y utilizarlas más, mayor penetración de renovables, desarrollo del almacenamiento, introducción del vehículo eléctrico, etc. Esto nos lleva a redes más inteligentes, flexibles, resiliente y seguras.
Sin las redes eléctricas no será posible alcanzar la transición energética, por esto es clave que se les dé la importancia que necesitan. Su desarrollo es fundamental para la descarbonización, por todo ello aspectos como la ciberseguridad, flexibilidad, digitalización son pilares fundamentales.
En nuestra opinión, sin duda la transformación digital y la ciberseguridad son los campos de progreso más destacados. Es clave avanzar en estas cuestiones, para lograr que las redes sean más flexibles, resilientes y seguras, y por ende más eficientes.