"España es líder europeo en cables de seguridad en caso de incendio"

Creemos, sin lugar a dudas, que un factor determinante es la inclusión de la norma por parte de la Administración Pública en la reglamentación. La necesidad de tener presunción de conformidad con los requisitos reglamentarios hace que se incremente el interés por una norma.

Es difícil destacar alguna norma por su importancia, todas son importantes. Pero sí me gustaría destacar dos normas con requisitos de seguridad en el comportamiento de los cables en caso de incendio. Ambas citadas en el Reglamento Electrotécnico para Baja Tensión de 2002.

Se trata de la UNE 211002 Cables eléctricos de baja tensión. Cables de tensión asignada inferior o igual a 450/750 V (Uo/U). Cables unipolares sin cubierta, con aislamiento termoplástico, y con altas prestaciones respecto a la reacción al fuego, para instalaciones fijas; y la UNE 21123-4 Cables eléctricos de utilización industrial de tensión asignada 0,6/1 kV. Parte 4: Cables con aislamiento de polietileno reticulado y cubierta de poliolefina.

Su importancia sobrepasa las aplicaciones del mencionado Reglamento, pudiendo afirmar que España, con estas normas, es líder europeo en cuanto a la utilización de cables de estas características.

Sin lugar a dudas, creo que su labor como galvanizador de las actividades de normalización es fundamental para la sociedad española ya que abarca tanto a las diversas Administraciones Públicas como a sectores industriales y de servicios. Esto significa, en la práctica, poder desarrollar y alcanzar los beneficios de la normalización como transparencia tecnológica de los mercados, facilitar la prescripción y seguridad de los usuarios, ayuda a la exportación, etc.

Cada día aparecen en los medios de comunicación y en las redes sociales informaciones de nuevos campos de actividad que afectan a nuevas tecnologías, a la sostenibilidad y el medio ambiente, I+D, economía circular, eficiencia de recursos, etc.

De todos ellos, quisiera destacar que es fundamental el apoyo a una economía eficiente y circular, en el uso de los recursos del ciclo de vida del producto que nos hagan más competitivos. En este sentido, la actividad de normalización que se desarrolla en el seno de UNE es de máxima importancia y debe seguir potenciándose. Ya que, además, es generadora de empleo de calidad.