Las normas técnicas del CTN-UNE 220 se desarrollan fundamentalmente en el ámbito internacional del Comité IEC/TC 82. En el plano nacional, la creación del Foro UNE de Energías Renovables Eléctricas es una de las actuaciones del Plan Estratégico UNE 2025 para dar respuesta al objetivo Apoyar a la transición ecológica y energética con las actividades de normalización y cooperación internacional para aportar soluciones en estos ámbitos.
En los últimos cuatro años, la energía solar fotovoltaica se ha posicionado como líder en España por el incremento de la potencia instalada. Desde 2019, se mantiene un crecimiento de alrededor del 30 % con respecto al año anterior y, actualmente, nuestro país cuenta con cerca de 20.000 MV instalados; esto representa la sexta parte del total nacional y le otorga a la fotovoltaica un puesto privilegiado en el mix energético.
Este crecimiento imparable viene acompañado de una mejora continua en el sector: las instalaciones y sus componentes se han optimizado en términos de materiales, seguridad, durabilidad y rendimiento. Aparecen aplicaciones y soluciones innovadoras, que enlazan con otros sectores como el de la construcción o la automoción.
El Comité UNE de Sistemas de energía solar fotovoltaica (CTN-UNE 220) no es ajeno a toda esta evolución. Desde sus inicios hace décadas como subcomité del CTN-UNE 206 de Producción de energía eléctrica (CTN-UNE 206/SC 82) ha destacado siempre por la intensa actividad de los casi 80 expertos que suman sus 30 vocalías. Las normas técnicas del CTN-UNE 220 se desarrollan, casi en su práctica totalidad, en el ámbito internacional del Comité IEC/TC 82 y se estructuran en grupos diferenciados:
Terminología: una experta española está liderando el mantenimiento de la especificación técnica IEC TS 61836-1 ED1 Solar photovoltaic energy systems - Terms, definitions and symbols - Part 1: Basic terms, incorporando nuevos términos y definiciones, y encaminando este documento a su futura inclusión en el Vocabulario Electrotécnico Internacional (IEV o Electropedia).
Módulos fotovoltaicos: los estándares se refieren a ensayos ambientales, criterios de garantía de calidad, rendimiento, cualificación del diseño y homologación, entre otros aspectos. Además de las características eléctricas y mecánicas, se tienen en cuenta el comportamiento térmico y la resistencia a fallos y se da cabida a distintas tecnologías de fabricación para conseguir normas universales.
Sistemas conectados a red: este grupo incide en la calidad de la energía que se vierte a la red eléctrica, incluyendo requisitos para los convertidores, compatibilidad electromagnética y criterios básicos y de seguridad que afectan a la garantía de suministro.
Sistemas autónomos: estos sistemas cobran especial importancia en áreas donde no existe una red eléctrica suficientemente desarrollada. La fotovoltaica, por su facilidad de instalación y de hibridación con otras energías -renovables o no renovables-, se apoya en normas desarrolladas por este grupo; y en ocasiones por grupos mixtos en los que colaboran expertos de otros comités (baterías, generación distribuida, etc.).
Estructuras y concentradores fotovoltaicos: sus normas incorporan los últimos desarrollos para módulos de concentración y estructuras adicionales que implican requisitos diferentes a los módulos convencionales. En este grupo destacan los proyectos y normas para seguidores solares.
Marco global
Uno de los objetivos esenciales de los estándares internacionales es proporcionar un marco global para la mejora del comercio de equipos y de servicios, manteniendo el nivel requerido de prestaciones y seguridad. En el caso de la fotovoltaica, esto se ve reforzado gracias al Sistema IECRE (IEC System for Certification to Standards Relating to Equipment for Use in Renewable Energy Applications). IECRE es un sistema de evaluación de la conformidad basado en el reconocimiento mutuo entre entidades de certificación, laboratorios de ensayo, fabricantes, proveedores y usuarios finales.
Evidentemente, el IEC/TC 82 proporciona las normas necesarias para que los expertos de IECRE desarrollen los documentos operacionales del esquema. IECRE contempla certificados de productos (de componentes, de prototipo y de tipo) y certificados de proyectos (diseño de centrales y plantas, puesta en servicio, mantenimiento y operación).
Fomentar alianzas
Desde UNE fomentamos las alianzas entre los distintos agentes que forman la cadena de valor de las energías renovables. En el marco del Plan Estratégico UNE 2025, y como respuesta a uno de sus objetivos Apoyar a la transición ecológica y energética con las actividades de normalización y cooperación internacional para aportar soluciones en estos ámbitos, se materializó una de las actuaciones previstas en el Plan de Gestión de UNE para 2022, constituyéndose en el mes de noviembre el Foro UNE de Energías Renovables Eléctricas.
El foro está formado por entidades miembro de UNE en el ámbito de las energías renovables para la producción, distribución y gestión de energía eléctrica y pretende aunar esfuerzos en materia de estandarización, e impulsar la utilización de normas como apoyo a la legislación nacional y europea. Los vocales valoran muy positivamente este punto de encuentro que les permite abordar cuestiones transversales, posicionarse como gran sector y aprovechar la experiencia de los comités más consolidados – eólico y fotovoltaico – en los comités más recientes (pilas de combustible, marina y termosolar).
La industria fotovoltaica afronta con entusiasmo los nuevos retos que presenta el mercado. Se integra cada vez más en diversas aplicaciones, de todo tipo y tamaño, desarrollando soluciones sostenibles en los ámbitos de transporte (Vehicle-Integrated Photovoltaics, VIPV) y construcción (Building inte-
grated Photovoltaics, BIPV). La conciencia social sobre el cambio climático ha favorecido el autoconsumo doméstico basado en energía fotovoltaica que, además, tiene muchas ventajas en cuanto a instalación y ahorro, fácil mantenimiento, incremento del valor del inmueble y eficiencia energética.
Comité UNE de Sistemas de energía solar fotovoltaica
Relaciones internacionales
Presidente
Fernando Fabero Correas
Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas
(CIEMAT)
Opinión
Normas para dar respuesta a las exigencias del mercado
Fernando Fabero
Presidente
Comité UNE de Sistemas de energía solar fotovoltaica
(CTN-UNE 220)
La energía solar fotovoltaica desempeña cada vez con más fuerza un papel determinante en la descarbonización de la economía, la consecución de un desarrollo sostenible y el objetivo de alcanzar neutralidad climática antes de 2050. Es tal su empuje, que la previsión de potencia fotovoltaica instalada que recogerá la revisión del actual Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC) será de 76,387 MW instalados para 2030 frente a los 39,181 MW inicialmente previstos.
Y es que, la generación eléctrica fotovoltaica presenta muchos factores que la hacen también, aparte de económicamente, tremendamente atractiva desde el punto de vista técnico: es la única tecnología capaz de convertir directamente la radiación solar en energía eléctrica, es modular, fácilmente ampliable y de mantenimiento muy sencillo, no utiliza agua, puede consumirse en el mismo lugar donde se genera, es de rápida instalación y abarca un amplio intervalo de potencias desde los mW (relojes, calculadoras,…) hasta los centenares de MW de las centrales actuales. Y tiene un papel social muy relevante en países donde la red eléctrica convencional no es accesible a la mayoría de la población.
Los módulos fotovoltaicos que hasta hace unos años eran reconocibles solamente en pequeñas instalaciones aisladas de la red han pasado a formar parte del paisaje habitual de nuestros campos y ciudades. Y no hay duda de que la normativa ha tenido un papel muy destacado en este cambio proporcionando el marco adecuado para que estos sistemas sean, entre otros aspectos, duraderos, fiables y seguros. Y continúa en primera línea de actividad para que las nuevas aplicaciones que están llegando (agrivoltaica, automoción, sistemas flotantes, mobiliario urbano,…) lo hagan en un entorno adecuado a un mercado tremendamente exigente.